Enredados

Las bondades de un cabello bien cuidado

Hay algo en las películas de animación que últimamente me invitan mas a asistir a las salas que otro tipo de cine (con sus muy escasas excepciones), y es porque siento casi  garantizado el hecho de que por lo menos voy a desquitar mi dinerito invertido en entrada, palomitas y refresco en  una película tan inteligente  que además de respetar y entretener a un público menor de edad también mantiene interesada  y divertida a su contraparte adulta que son a final de cuentas los que pagan, llevan y acompañan durante la función. Dicho lo anterior y sirviéndome de escusa por haber visto una película de “princesitas encantadas”, confieso que disfrute muchísimo de Enredados.   

No estoy seguro si fue por la persona que me acompaño a verla o las situaciones  que atravieso en estos momentos o una combinación, pero está película contada a modo de cuento clásico se sintió tan actual para mí que sobra decir que me enamore de la princesa, el héroe me cayó a toda madre, deteste a la villana por situaciones tan conocidas y personales que no me gustaría arruinar para otro -pero estoy seguro entenderán cuando la vean - ,  me reí como niño y sin ánimos de leerme cursi o poner en duda mi virilidad (too late) suspire y contuve el aliento por momentos… ejem.   

Solo como comentario, vi la película en español,  el doblaje es supremo (mucho mejor que el de Megamente, de la cual si me quede con ganas de ver en ingles),  está ligeramente basada en el cuento de los hermanos Grimm, la animación es estupenda y aunque es caricaturesca los gestos de los personajes en ocasiones son tan vividos y apegados a la realidad que en mas de una ocasión pense que estaban vivos y por último se podría decir que es de lo creadores de Bolt.